El avión de vigilancia -de serie LX-N90450, que todavía luce su esquema especial que celebra el 40 aniversario de la alianza de la OTAN- llegó a la base rumana el 17 de enero. Aunque no se ha anunciado oficialmente la fecha de finalización del despliegue, se espera que dure varias semanas. El E-3A se ha desplegado con un contingente de apoyo de 180 militares multinacionales de la OTAN y operará únicamente sobre territorio de la OTAN.
Este despliegue se lleva a cabo para ayudar a reforzar aún más la presencia de la OTAN en su flanco oriental, que ha visto un aumento espectacular en el número de patrullas aéreas de combate (CAP), junto con salidas de aviones cisterna y de vigilancia, desde que comenzó la invasión no provocada de Ucrania por parte de Rusia el 24 de febrero de 2022. Con las misiones CAP regulares que se llevan a cabo para vigilar la actividad rusa cerca de la frontera oriental de la alianza, el E-3A se utilizará para apoyar estas misiones mediante la identificación de cualquier aeronave rusa que se aproxime al espacio aéreo de la OTAN.
Oana Lungescu, portavoz de la OTAN, comentó el despliegue y las capacidades generales del E-3A: "Mientras la guerra ilegal de Rusia en Ucrania sigue amenazando la paz y la seguridad en Europa, no debe haber ninguna duda sobre la determinación de la OTAN de proteger y defender cada centímetro de territorio aliado. Nuestros AWACS pueden detectar aviones a cientos de kilómetros de distancia, lo que los convierte en una capacidad clave para la disuasión y la defensa de la OTAN. Doy las gracias a Rumanía por acoger el avión, que supone una importante contribución a nuestra alerta temprana."
