El MQ-9A constituye un elemento clave de la fuerza expedicionaria no tripulada (MUX) de la Marine Air-Ground Task Force (MAGTF). La VMU-3 operó anteriormente sistemas no tripulados más pequeños y de menor capacidad, como el MQ-27 ScanEagle, el RQ-21 Blackjack y el RQ-7 Shadow durante las operaciones militares estadounidenses en Irak y Afganistán.
El USMC encargó ocho MQ-9A de alcance ampliado a General Atomics Aeronautical Systems Inc (GA-ASI) en el marco de la Agile Reaper Enterprise Solution de la USAF, que utiliza un modelo de contratación de entrega indefinida y cantidad indefinida (IDIQ) para adquirir MQ-9A para clientes estadounidenses y de exportación con mayor rapidez. Recibió sus dos primeros MQ-9A en mayo de 2023. El USMC no armará sus MQ-9A y no los llamará "Reapers" para subrayar la diferencia de misión con la USAF.
El contrato forma parte de un cambio más amplio de las operaciones de los MQ-9A de propiedad de la compañía y operados por la compañía (COCO, por sus siglas en inglés) a un modelo de propiedad del gobierno y operados por el gobierno (GOGO, por sus siglas en inglés). Los Marines han realizado 7.000 horas de operaciones de vuelo COCO desde septiembre de 2018, utilizando dos aeronaves que fueron transferidas de la USAF, que está desinvirtiendo su flota de MQ-9A. Estas dos aeronaves fueron adquiridas por el USMC en agosto de 2021. Mientras tanto, las tripulaciones de VMU-1 'Watchdogs' realizaron su primer vuelo operativo de un MQ-9A arrendado (COCO) en Oriente Medio el 20 de marzo de 2020.
El MUX MALE (como se clasifica el MQ-9A del USMC) proporcionará capacidades operativas de nivel 1, incluido un conjunto de misiones de inteligencia, vigilancia y reconocimiento (ISR), además de misiones de retransmisión de comunicaciones, guerra electrónica y alerta temprana aerotransportada. Se están estudiando futuras funciones para los MQ-9A, incluido el apoyo aéreo ofensivo.
El teniente coronel Nicholas Law, comandante de la VMU-3, declaró: "Utilizaremos estos medios para proporcionar un conocimiento exhaustivo del dominio marítimo, sirviendo como guías para nuestras fuerzas combinadas y conjuntas". Se refirió a estas capacidades avanzadas como imprescindibles para satisfacer las exigencias de seguridad del entorno operativo del siglo XXI.
