Se ha inaugurado un estudio fotográfico totalmente automatizado, LiloPhoto, en la terminal B del aeropuerto internacional de Sheremetyevo, en Moscú.
Diseñado para facilitar su uso, el estudio automatizado permite a los clientes crear retratos de alta calidad. A diferencia de los fotomatones convencionales, cuenta con equipos fotográficos e iluminación profesionales. El estudio es espacioso y cómodo, y lo suficientemente grande para acomodar a un grupo, según el aeropuerto.
Cada sesión fotográfica dura entre cinco y diez minutos y cuesta 350 rublos (3,30 euros). Incluye la elección de una de las seis opciones de iluminación del estudio (de débil a fuerte), y dos tandas de diez fotos cada una. Las fotos se muestran en una gran pantalla táctil. Los pasajeros pueden optar por imprimir su imagen favorita y también recibirán una versión digital por correo electrónico.
