Italia desplegó los F-35A Lightning II de forma operativa por primera vez en octubre para llevar a cabo la misión de policía aérea de la OTAN para salvaguardar el espacio aéreo de Islandia, y Combat Aircraft tuvo acceso exclusivo al destacamento de Keflavík.
CON SU REMOTA ubicación geográfica y su total falta de capacidades orgánicas de defensa aérea, Islandia depende completamente de sus aliados de la OTAN para la vigilancia aérea. La presencia periódica de aviones de combate de la OTAN en la base aérea de Keflavík se considera suficiente para mantener la integridad de su espacio aéreo. A diferencia de la misión de la Policía Aérea del Báltico (BAP), que implica una cobertura continua, el gobierno islandés sólo ha solicitado una media de tres despliegues anuales, cada uno de los cuales dura entre tres y cuatro semanas.
