Milán Linate completa la remodelación de 40 millones de euros

Los trabajos en el aeropuerto han consistido en el rediseño arquitectónico y funcional de las zonas de facturación, filtros de seguridad y duty free, así como en la ampliación de la terminal con una nueva zona desarrollada en tres niveles

Tras casi dos años de trabajo, se ha completado un proyecto de remodelación de 40 millones de euros en el aeropuerto milanés de Linate. La remodelación del aeropuerto se presentó el 8 de junio con la presencia del Presidente italiano, Sergio Mattarella.

Según el operador aeroportuario, el grupo SEA, el proyecto de la terminal tenía como objetivo dotar al aeropuerto urbano de Milán de una nueva identidad que caracterizara los espacios, el ambiente y los materiales, con el fin de mejorar la experiencia del viajero y la satisfacción del cliente.

Milano Linate Airport
Photo Milano Linate 

En las áreas operativas, el proyecto se inspiró en la neuroarquitectura, que es la neurociencia aplicada a la arquitectura, con el objetivo de crear espacios capaces de fomentar el bienestar y reducir al mínimo el estrés y la ansiedad.

Para ello, la zona de facturación se ha rediseñado con un techo de doble altura que incluye un diseño de bafles de efecto madera con velas de cartón yeso y efectos de iluminación LED para mejorar la percepción del espacio circundante.

También se han añadido plantas alrededor de la terminal para dar al entorno una sensación "verde".

El sistema de seguridad de Linate también se ha renovado con la introducción del sistema de embarque facial, con el que los pasajeros pueden asociar su huella dactilar biométrica a su documento de identidad y tarjeta de embarque, lo que significa que ya no tienen que mostrar ninguna identificación hasta el momento de embarcar, lo que acelera el tránsito por la terminal.

El aeropuerto ha invertido en nuevas máquinas EDS-CB (Sistema de Detección de Explosivos para el Equipaje de Cabina) que utilizan tecnología CT para que los pasajeros no tengan que separar los aparatos electrónicos y los líquidos del equipaje de mano, lo que acelera aún más el proceso.

La parte principal del rediseño se centró en la nueva zona de la terminal, que supuso la demolición del antiguo edificio para crear un nuevo espacio de tres plantas y una superficie total de 10.000 m2. Esta obra ha permitido ampliar las salas de embarque, así como la nueva zona comercial y el patio de comidas, creados en un espacio de doble altura, que permite la entrada de luz natural y una circulación más cómoda de los pasajeros.

Los diseñadores de Linate querían que la terminal representara a Milán ante el mundo, por lo que se ha establecido una colaboración con el Museo del Diseño de la Trienal para permitir la instalación de obras históricas de famosos diseñadores italianos a lo largo del flujo de pasajeros.