Un escuadrón de la RAF de "cazas furtivos" F-117A, operando desde un aeródromo secreto en lo profundo del desierto de Nevada - podría parecer material de ficción, pero si el gobierno de Thatcher hubiera seguido la oferta de la administración Reagan de esta pieza más avanzada de la tecnología aeroespacial estadounidense de los años 80, podría haber ocurrido. Contamos la historia del Proyecto "Moonflower" con una profundidad sin precedentes, con la ayuda de uno de los pilotos de pruebas británicos que voló el F-117 cuando todavía era muy "negro".
"Querido Ron,
Muchas gracias por tu encantadora carta y por tu amabilidad al enviar a Cap a informarme. Me ha impresionado enormemente tu espléndido logro: ¡tres hurras por América! También me conmovió mucho la generosidad de la oferta de participación que trajo. Esto demuestra una vez más quiénes son nuestros verdaderos amigos. Seguiremos la oferta inmediatamente con los expertos que ha nombrado. Seguiremos restringiendo el conocimiento muy de cerca por nuestra parte...
Con los mejores deseos.
Atentamente, Margaret".
La calidez de ese mensaje personal de Margaret Thatcher a Ronald Reagan, fechado el 17 de marzo de 1986, no es sorprendente. Cuando se desclasificó…