Hace cincuenta años, el poderoso McDonnell Douglas DC-10 entró en servicio con American Airlines, marcando el inicio de una carrera de décadas transportando pasajeros y carga por todo el mundo.
Sin embargo, su comienzo en la vida se vio empañado por una serie de accidentes durante la década de 1970. Un fallo de diseño en la puerta de carga provocó en dos ocasiones su reventón, con el consiguiente colapso del suelo de la cabina y el corte de los cables de control y de los conductos hidráulicos.
En el primer caso, el vuelo 96 de American Airlines perdió la puerta de carga sobre Windsor, Ontario. Con un control limitado, los pilotos pudieron realizar un aterrizaje de emergencia seguro.
Sin embargo, dos años después, el vuelo 981 de Turkish Airlines sufrió un fallo similar, pero esta vez la descompresión explosiva cortó los cables de control críticos. La tripulación perdió el control del avión y se estrelló. Las 346 personas a bordo murieron.
Los años 70 siguieron siendo problemáticos para el nuevo trijet, ya que en 1979 American Ai…